
Rumania, años 60. Serafim, un médico recién recibido, es enviado al Hospital de Palilula, un pequeño pueblo perdido en algún lugar de la llanura valaca, después de la muerte del anterior médico, el Dr. Pantelică. Palilula es un lugar donde coexiste lo insignificante con las cosas encantadoras; con un hospital donde los pacientes están perfectamente sanos, donde hay maternidad pero no hay niños y donde uno de los entretenimientos favoritos es ayudar en las disecciones en la morgue. Los cambios de los regímenes políticos, las muertes, los incendios, las inundaciones, … nada parece molestar a los habitantes de Palilula. Inquietos y perezosos, alegres y melancólicos, siempre están ahí, juntos, en la terraza con adelfas, en el hospital y en el Hotel Boema. Las manifestaciones dedicadas a la “lucha por la paz”, impuestas en toda Rumania por el nuevo líder del partido, tienen lugar en Palilula con el mismo espíritu de negligencia con que se maneja cualquier otra cuestión. Serafim se adapta, gradualmente, a la vida en ese mundo y termina por pertenecer a él, incluso sin querer…





